miércoles, 4 de diciembre de 2013

Franqueza. La "nuestra" y la de "los otros"

A estas alturas quizá ya nos sea claro que la parresía, el hablar con franqueza de los clásicos reivindicado por Foucault como clave para pensar y vivir lo político, toca con la compleja cuestión de una "gobernabilidad" donde es más importante hablar desde la verdad que desde la información, pues:

"... en parresía, el hablante usa su libertad y elige la franqueza en vez de la persuasión, la verdad en vez de la falsedad o el silencio, el riesgo de muerte en vez de la vida y la seguridad, la crítica en vez de la adulación y el deber moral en vez del propio interés y la apatía moral..."

Cuestión y palabras que nos relanzan a una problematicidad -tal la expresión del autor francés- que los griegos conocieron a la perfección y que de alguna manera nos legaron conceptual y pragmáticamente, aunque empecinadamente sigamos cayendo en su olvido. Nos referimos al hecho de que el "juego parresiástico" no solo debía suponer la honestidad de los gobernantes, sino también la de los gobernados. Se trataba por tanto de una "gobernabilidad" donde el gobierno ejercido desde el exterior venía a fundarse en las propias capacidades personales para el auto-gobierno. 
Una cuestión que como señalara Foucault en su celebre Curso del Collège de France de 1982, inscribíase a su vez en la "inquietud o cuidado de sí" que toda la tradición grecorromana tardía y la espiritualidad cristiana primitiva cultivaron. Pero como decíamos hace una semana, Occidente hace tiempo que no vive lo político desde aquel sutil entramado. Por un lado dada la creciente complejización de nuestros Estados en tanto comunidades políticas cada vez más desencajadas respecto a lo real, a lo existencial. Por otro, porque  la "inquietud o cuidado de sí" al día de hoy ha venido a cargarse de valoraciones negativas. Quizá como resultado de unas no siempre acertadas comprensiones acerca de los otros.
Frente a los resultados: una "gobernabilidad" circunscrita a la realpolitik, atenta a lo práctico antes que a lo ético, y una "inquietud o cuidado de sí" a caballo entre la comodidad hedonista y el voluntarismo altruista, queda que volvamos a repensar el legado de los antiguos sobre la propia franqueza como mejor antídoto contra la no-franqueza, especialmente cuando las cuotas de ésta se hacen ingentes. Sino, mirad lo que provocadoramente os dejo...  


Quedamos como siempre a la espera de comentarios y sugerencias.
c. Perpetuo Socorro 4, oficina 3 - 50006, Zaragoza. 
coachsergiolopezcastro@gmail.com
616 023 822
Un saludo cordial.

No hay comentarios:

Publicar un comentario